Quienes “agarran carretera” están muy atentos a llevar todo lo que necesitan en su destino, pero son pocos los que piensan en las condiciones del vehículo que los transportará; así que en este artículo le daremos unos buenos consejos a quienes tienen la responsabilidad de conducir.
Nunca tomes carretera sin que un experto mecánico avale las condiciones de tu carro. Llévalo al taller con anticipación para evitar afanes o retrasos en el servicio. Si en la revisión se detecta algún fallo, haz que lo reparen de inmediato y sal con la seguridad de que tu vehículo responderá al dejar la ciudad.
Tu vida y la vida de las personas que te acompañan dependen exclusivamente de ti, por eso debes estar en condiciones excelentes para conducir en carretera. No ingieras alcohol antes de manejar, ya que sus efectos pueden tardar más de un día en desaparecer de tu sistema.
Relájate mientras conduces. Ten presente que seguro existirán trancones en la vía debido a la gran cantidad de viajeros. Pon la música que más te guste y charla con tus acompañantes, eso hará más corto el camino y te evitará el estrés de estar tras el volante.
Desconéctate de las distracciones que puedan ocasionar accidentes. Avisa a tus principales contactos que tienes las responsabilidad de conducir y entrega tu teléfono a algún acompañante que conteste si se presenta alguna llamada importante.
Ubica tu documentación y la del vehículo en un lugar fijo al que sea fácil acceder como la guantera. El SOAT, el seguro, la tarjeta de propiedad, tu cédula y el pase, son indispensables, así que alístalos desde ya. Un tip adicional: ten a mano los recibos de los peajes, ya que allí está la línea de atención en caso de una emergencia.
Come ligero antes de iniciar un trayecto largo, ya que la digestión de mucha comida te puede agotar mientras conduces por carretera y esto representa un peligro.
Para estar alerta mientras manejas es fundamental que hayas tenido un correcto descanso horas antes de sentarte al volante. Duerme bien, acuéstate temprano y estarás lleno de energía para “pedir vía”.
El kit de carretera no puede faltar nunca en tu carro. Revisa que esté completo antes de arrancar el viaje: llanta de repuesto con la correcta presión de aire, gato hidráulico, juego de llaves para cambiar una llanta, guantes, triángulos, tacos, chaleco reflectivo, cruceta, extintor con fecha vigente, un buen botiquín de primeros auxilios, linterna y botellas de agua.
Antes de prender el motor revisa que los niveles de aceite y de líquido refrigerante sean correctos. Verifica la presión de las ruedas y el correcto funcionamiento de los frenos. Prueba las luces y no olvides tener una buena cantidad de gasolina en el tanque.
Define con anticipación la ruta que recorrerás y revisa con anticipación el estado de la vía consultando aplicaciones on-line, estás son muy prácticas y te dan información importante del recorrido, lo ideal es que uno de tus acompañantes te avise las notificaciones que anuncie.